Sazonamos 6 bifes finitos de nalga y los marinamos durante dos horas con una mezcla de aceite, mostaza y vinagre a gusto de cada uno.
Una vez marinados, extendemos los bifes sobre una tabla. A cada bife lo cubrimos con tiritas de morrones y en una de sus puntas 1/4 de huevo duro. Luego, a cada uno lo arrollamos y lo sujetamos con un palillo. Doramos los niños en una sartén con 30 gramos de manteca y una cucharada de aceite, para que no se nos queme la manteca. Cuando se hayan sellado bien, agregamos a la sartén un vaso de vino blanco de buena calidad y dos tazas de apio picado. Lo cocinamos hasta que este todo bien tierno. Lo condimentamos con sal, pimienta y una pizca de jengibre si es de vuestro gusto. Se debe servir bien caliente.