Famosa por su perfume penetrante, su pulpa jugosa, color y graciosa forma, las mandarinas han ganado actualmente un lugar distinguido en nuestra cocina. Este pequeño fruto es originario de China y se da el lujo de ser una de las frutas que aporta menos calorías. Sólo 40 en 100 gramos y es muy rica en vitamina C y Calcio.
VARIEDADES:
Los productos de cruces espontáneos o aquellos realizados por la mano del hombre, han dado origen a otros grupos.
A la izquierda tenemos una mandarina común y a la derecha, la mandarina japonesa o satsuma.
A la izquierda tenemos una mandarina tangeriana y a la derecha la mandarina climentina, resultado de la mezcla de mandarina y pomelo. Se pela fácilmente, tiene escasas semillas y un delicioso equilibrio de dulzura y acidez, que la hace apta para platos dulces y salados. Por lo general, se consume natural como postre, pero también puede ser confitada y es utilizada en la cocina y en repostería. Para realzar su sabor, nada mejor que el Kirsch.