Ingredientes:
Acelga, 1 atado chico
Ricota fresca compacta, 500 gramos
Yemas, 2
Queso rallado, 3 cucharadas soperas
Leche, 3/4 de taza tamaño té
Fécula de maíz, 1 cucharada sopera rasa
Harina leudante, 2 cucharadas soperas
Claras, 2
Sal, pimienta y nuez moscada, a gusto
Manteca, (para untar), cantidad necesaria
Pan rallado, (para espolvorear), cantidad necesaria
Queso blanco, (para la cubierta), 100 gramos
Queso rallado, (para espolvorear), 2 cucharadas soperas
Ensalada, (para acompañar), a gusto
Preparación:
Cocinar las hojas y las partes más tiernas de los tallos de la acelga con el agua del lavado hasta que pierdan la rigidez. Escurrir y presionar bien. Picar y colocar en una sartén para eliminar el resto de líquido. Reservar. Poner la ricota, las yemas, el queso rallado y la leche en un recipiente. Mezclar y adicionar la acelga, la fécula de maíz y la harina. Volver a mezclar y reservar. Batir las claras a punto nieve e incorporar a la preparación anterior. Mezclar con movimientos envolventes. Condimentar con sal, pimienta y nuez moscada. Ubicar la preparación en un molde de 18 centímetros de diámetro previamente enmantecado y espolvoreado con pan rallado. Colocar el queso blanco en la superficie y espolvorear con queso rallado. Cocinar en horno precalentado a temperatura moderada por 30 minutos o hasta que la preparación esté firme, pero esponjosa. Retirar y dejar entibiar. Desmoldar y acompañar con ensalada a gusto.