INGREDIENTES:
Frambuesas frescas o congeladas: 500 gramos
Gelatina sin sabor: 2 sobres (14 g)
Agua: 1 pocillo
Queso blanco compacto: 200 gramos
Yogur de frutilla: 1 pote
Claras: 3
Azúcar: 1/2 taza tamaño té
Frambuesas y moras (para decorar): 250 gramos
Hojas de menta: cantidad necesaria
PREPARACIÓN:
Procesar las frambuesas y colocarlas en una cacerola. Llevarlas a fuego medio hasta que rompan el hervor. Hidratar la gelatina en el agua y unir a las frambuesas. Bajar el fuego y continuar cocinando 1 minuto. Retirar la fruta del fuego y pasarla a un bol. Dejar enfriar a temperatura ambiente. Mezclar el queso blanco y el yogur. Adicionar esta mezcla a la preparación de frambuesa. Reservar. Colocar las claras junto con el azúcar en un bol de metal, llevar a fuego bajo o volando sobre la llama y comenzar a batir hasta que las claras estén tibias y los cristales del azúcar disueltos. Retirar y seguir batiendo hasta lograr un merengue liviano. Unir la mezcla anterior y la preparación de frambuesa con movimientos envolventes. Dejar enfriar en la heladera por, aproximadamente, 3 horas. Cuando esté firme, distribuir en copas y decorar con frambuesas, moras y hojas de menta.