Ingredientes:
2 y 1/2 tazas de harina
2 cucharadas de vinagre
4 ó 5 cucharadas de agua
1 cucharadita de sal
1/2 cucharadita de polvo de hornear
200 gramos de margarina
Relleno:
2 paquetes de acelga
100 gramos de queso rallado
2 cebollas ralladas
4 huevos
sal, pimienta y nuez moscada, a gusto
2 cucharadas al ras de orégano
200 gramos de mortadela en fetas
Preparación.
Masa:
Mezclar el vinagre con el agua y poner a enfriar en la heladera. Colocar sobre la mesa la harina, la sal, el polvo de hornear y la margarina cortada en trocitos. Frotar la margarina y la harina con las palmas de las manos hasta formar una mezcla arenosa. Poner en un bol y con tenedor mezclar mientras le agregamos el agua y el vinagre. Poner la masa sobre la mesa y unir rápidamente. Colocarla en una bolsa de polietileno y dejarla en la heladera.
Relleno:
Lavar las acelgas y hervirlas junto con las pencas. Cuando están tiernas, escurrirlas, exprimirlas y picarlas muy finitas. Mezclarlas con el queso rallado, las cebollas ralladas y los huevos. Sazonar con la sal, la pimienta, el orégano y la nuez moscada.
Armado y cocción:
Estirar las 2/3 partes de la masa dejándola fina y forrar una tartera enmantecada y enharinada. Recortar los bordes en forma prolija. Pinchar la masa con un tenedor y tapizar el fondo con algunas fetas de mortadela y por encima la mitad de las acelgas, otra capa de fetas de mortadela y el resto de la acelga. Estirar lo que queda de la masa, cortar en tiras y cubrir el relleno formando un enrejado. Cocinar en horno moderado hasta que esté firme y dorada.
La mortadela puede reemplazarse por cualquier otro fiambre o por trozos de carne cocida.
